España siempre ha sido una musa para intelectuales y artistas, que han buscado en sus calles y en sus gentes inspiración para sus creaciones. Por nuestra geografía han pasado escritores tan míticos como Ernest Hemingway o Washington Irving. Durante el siglo XIX muchos de estos viajeros extranjeros difundieron una imagen romántica de nuestro país por Europa. Dos de ellos fueron el ilustrador Gustave Doré y el hispanista Jean-Charles Davillier. Ahora el Museo Carmen Thyssen Málaga les dedica la exposición Gustave Doré, viajero por Andalucía.
Gustave Doré y Jean-Charles Davillier recorrieron juntos diversas ciudades de nuestro país. Sus viajes desencadenaron una serie de crónicas de sus impresiones, que fueron publicando entre los años 1862 y 1873 en la revista Le tour du Monde, editada en París. En el año 1874 reúnen todos estos textos en una compilación que se titulará L’Espagne. Ahora tenemos la suerte de tener ese libro en forma de exposición, que se puede visitar hasta el 15 de julio en el Museo Carmen Thyssen Málaga.
“Cuando en 1862 el ilustrador Gustave Doré y el hispanista Jean-Charles Davillier iniciaron su viaje por España, el país todavía se consideraba un destino exótico, pese a la tímida modernización y el crecimiento económico producido entre 1815 y 1830. España era, geográficamente hablando, un oriente cercano, idea sustentada por los edificios y restos árabes conservados”, leemos en sinopsis de la exposición. Doré y Davillier quería ofrecer al extranjero una imagen más real de lo español.
En esta exposición el visitante podrá disfrutar de una colección de xilografías estampadas para su publicación en Le Tour du Monde a partir de los dibujos originales de Doré. Aunque las publicaciones del ilustrador abarcaban todo el país, esta muestra se centra en Andalucía. 40 estampas, prestadas por la Universidad de Cantabria, donde podremos ver la mirada del francés a temas costumbristas como bailes o procesiones o monumentos como la Alhambra o la Mezquita de Córdoba.
Ambos habían visitado ya nuestro país previamente y durante su viaje conjunto ya eran artistas reconocidos. Doré se caracterizaba por su fecundidad creativa y había ilustrado grandes obras literarias de Dante, Byron o Balzac. En España quería completar su proyecto de ilustrar El Quijote de Miguel de Cervantes.
Aunque Doré quería ser recordado por sus pinturas, hoy en día le recordamos más por su faceta como dibujante y su labor gráfica. Así es como llega a la ciudad de Málaga este maravilloso viaje de la segunda vez que el ilustrador visitó nuestro país. El viaje definitivo para la realización de estas crónicas que tanto nos dicen de la Andalucía del siglo XIX junto al barón Jean-Charles Davillier, apasionado de España, que destinó su fortuna a estudiar el año español.
Entre sus estampas nos sorprenderán una Fotografía estereoscópica en albúmina del Puerto de Málaga en 1863 con la Manquita (catedral) de fondo o una xilografía del Patio de los Arrayanes, de 1864. La exposición se inauguró el pasado 6 de abril y estará abierta al público hasta el próximo 15 de julio en el Museo Carmen Thyssen Málaga, situado en calle Compañía, 10.